Otras especias que se han propagado son las vegetales apropiadas para establecer jardines urbanos mediante diseños de paisaje e involucrar poco a poco la cultura ciudadana hacia una apropiación de las áreas verdes de uso publico, buscando ampliar la gama de especies ofrecidas actualmente en el mercado y encontrar especies potenciales para jardinería en nuestros bosques, siempre en busca del rescate de nuestra diversidad y la valoración de nuestros ecosistemas.

Actualmente el vivero tiene varias especies nativas en fase de desarrollo, algunas propagadas por semilla y otras extraídas como plántulas del bosque, aplicando la teoría de Van der Hammen, en la cual se evalúa la capacidad de supervivencia para las plántulas según su cercanía al árbol madre, concluyendo que entre mas cerca crezcan a la madre, menor es la capacidad de sobrevivir.

En el año 2007, Cristian Rivas con la ayuda de Mauricio Camacho dan luz a la idea de conformar el vivero forestal para propagar especies vegetales nativas, experimentar manejo de semillas, control de plagas y nutrición vegetal. Para poder generar producción a largo plazo de plántulas en buen estado, y generar especies forestales potenciales para el uso urbano y para el enriquecimiento de áreas degradadas. El vivero forestal “Nativo” se construye en el predio manejado por la fundación denominado La Ponderosa, relicto destinado a labores de restauración, experimentación y producción.